El Observatorio de Autonomía Económica que forma parte del Observatorio de Igualdad y No Discriminación que lleva adelante el Centro de Documentación y Estudios(CDE) con el apoyo del Fondo de Igualdad de Género de Onu Mujeres(FIG), Diakonía, We Effect y la Unión Europea– recogió algunos datos sobre Mujer y Trabajo que generan preguntas sobre cómo podríamos las mujeres lograr la autonomía económica.
1- EL TRABAJO DE CUIDADO QUE NO ESTÁ FORMALIZADO: La tasa de desocupación afecta más a las mujeres (5,9 %) con respecto a los hombres(4,75 %), por tanto, de manera complementaria, los hombres presentan una mayor tasa de empleo que las mujeres (71,69 % frente a 47,90 %). El trabajo de las mujeres en casa no se ve. El trabajo de cuidado no está formalizado pero hay una encuesta de Uso del Tiempo que puede dar cuenta de la situación de las mujeres “desocupadas” en la EPH. ¿Qué pasaría si dejaramos de hacer las tareas de cuidado y sólo nos ocuparamos del trabajo formalizado?
2- EMPLEO DOMÉSTICO ES EL TERCER RUBRO DE LAS MUJERES Y ESTÁ DISCRIMINADO PR LEY: En cuanto a la población ocupada según categoría ocupacional, los hombres se concentran en dos categorías: empleado/obrero privado (48,35 %) seguido por trabajadores por cuenta propia (30,13 %). Mientras que la categoría cuenta propia aglutina a la mayor proporción de mujeres (31,72 %), en segundo lugar queda la categoría empleado/obrero privado (25,56 %) y en tercer lugar la categoría de empleado doméstico (17,11 %). Pero el empleo doméstico está discriminado por ley y solo ganan el 60% del salario mínimo. ¿Por qué el tercer rubro de empleo está discriminado por ley? ¿Será que si se paga a las Trabajadoras Domésticas una remuneración adecuada valorarán más el trabajo de las mujeres?
3- LAS PRODUCTORAS Y REPRODUCTORAS NO ESTÁN NO ESTÁN: Según la Encuesta Permanente de Hogares, según el tipo de trabajo que realizan existen diferencias entre hombres y mujeres. Las mujeres se concentran en dos grupos: trabajadores de servicios y vendedores (29.87 %) y trabajadores no calificados (22, 88 %). Mientras que los hombres se distribuyen en proporciones similares en tres grupos distintos tipos de ocupación: trabajadores no calificados (20,03 %), oficiales, operarios y artesanos (20, 89 %) y agricultores y trabajadores agropecuarios y pesqueros (19,47 %). ¿Qué es trabajo no calificado? ¿Cuidar ser humanos es un trabajo no calificado? ¿Siguen llamando amas de casa a las agricultoras y productoras del campo?
4- BRECHA SALARIAL El ingreso promedio mensual de la población ocupada asciende a un poco más de 2 millones 300 mil guaraníes. Los hombres perciben mayores ingresos que las mujeres y la brecha de ingresos oscila en alrededor de 645 mil guaraníes a favor de los hombres. Por situación en el empleo, las diferencias más importantes, las diferencias se observan en personas que trabajan como independientes, en donde la diferencia es de alrededor de 900 mil guaraníes. ¿Por qué el trabajo de las mujeres sigue valiendo menos para el mercado?
5- CABEZAS DE HOGAR. Para el 2017, se registra que 33,09 % de los hogares paraguayos están encabezados por mujeres, esta cifra es similar a las registradas en años anteriores. Cerca de 67,24 % de los hogares encabezados por mujeres son del área urbana. Entre las jefas de hogar predominan las solteras (26,28 %), seguidas por las unidas (22,99 %) y las casadas (20,15 %). ¿Por qué lo que parece ser una situación de poder “jefe de hogar” sólo es posible en ausencia de la pareja, pero además, está asociada a la pobreza?
6- POBREZA. La pobreza, medida por la línea de pobreza, afecta a alrededor de 20,15 % de los hogares encabezados por hombres, y aumenta 4 puntos porcentuales para el caso de jefatura femenina (24,25 %).
Fuente: Encuesta Permanente de Hogares 2017. http://www.dgeec.gov.py/